La Brigada "Aragón" I asume más protagonismo en la XVI Carrera del Ebro
El importe que irá destinado al proyecto solidario es de 17.230 euros
Para la Brigada «Aragón» I, organizadora en solitario por primera vez del evento, ha sido un orgullo poder anunciar que, gracias a las inscripciones de los participantes y a las aportaciones de nuestros patrocinadores, la Carrera del Ebro se ha convertido en la prueba benéfica con mayor recaudación de la ciudad de Zaragoza al superar los 17.000 euros de donación para el proyecto solidario escogido.
Como ya se anunció anteriormente todo lo recaudado irá destinado, a través de Cáritas Castrense, a la manutención y el cuidado del niño maliense, Bassi, en el tratamiento de la neurofibromatosis que padece. Durante este largo proceso la familia de uno de los componentes de la Brigada está acogiendo al pequeño.
Los valientes que cada año se enfrentan a la Carrera del Ebro se encontraron este año con la presencia de barro a lo largo de todo el recorrido debido a las lluvias de los últimos días. Esto añadió un punto de dureza, pero no borró las sonrisas de sus caras. Esas sonrisas son las que motivan a la «Aragón» a seguir apoyando, animando y dando servicio a los corredores que siempre agotan las inscripciones, incluso en esta edición que se había subido el límite hasta los 3.300 participantes.
En esta edición también tuvimos la novedad de que los propios soldados de la Brigada fueron los encargados del reparto de dorsales y bolsas del corredor el día anterior a la carrera, el sábado 24, en un marco tan emblemático para la ciudad de Zaragoza como es el Pabellón «Príncipe Felipe».
Una vez confirmado el feliz desenlace, la jornada finalizó con la entrega de premios de los vencedores en cada categoría y un reconocimiento a los patrocinadores que nos acompañan ya desde hace mucho tiempo. También hay que dar las gracias a los componentes de la Brigada «Aragón» I que, año tras año, conforman el músculo de todos esos aspectos por los que los corredores elogian la organización y continúan siendo fieles como son los avituallamientos, el jalonamiento con ánimos constantes, la ornamentación con vehículos históricos y de dotación o las consignas donde poder dejar sus efectos personales.
